Según las últimas cifras proporcionadas por Coordenada Urbana de Camacol, el año 2023 ha sido testigo de una drástica contracción en las ventas de viviendas en Colombia, con una caída del 44,9%. Este descenso se vio especialmente marcado en el segmento de vivienda de interés social (VIS), que registró una impresionante disminución del 49,7%. En términos absolutos, esto se traduce en la venta de 106.554 viviendas menos en comparación con el año anterior, representando una reducción de $ 20 billones en la inversión en vivienda por parte de los hogares.
El impacto de esta disminución en las ventas se ha dejado sentir en los inicios de obra de nuevos proyectos. Para diciembre de 2023, se habían iniciado un total de 138.418 viviendas, en comparación con las 193.387 contabilizadas al cierre de 2022, lo que representa una disminución del 28,4%.
Guillermo Herrera, presidente ejecutivo de Camacol, expresó su preocupación ante esta situación, destacando que el menor ritmo de iniciaciones se ha observado de manera generalizada tanto en vivienda no VIS (-22,5%) como en vivienda VIS (-30,6%). Herrera advirtió que estos menores niveles de obra podrían anticipar posibles efectos negativos en el empleo y el Producto Interno Bruto (PIB) del país, por lo que enfatizó la importancia de implementar una estrategia que permita impulsar la construcción de nuevas viviendas.
Ante este panorama, es crucial que los actores del sector inmobiliario busquen soluciones innovadoras y políticas efectivas para estimular la demanda de viviendas y reactivar el mercado, contribuyendo así a la revitalización de la economía nacional y a la generación de empleo en el país.